Desde que tomaste las riendas de tu fábrica o empresa, has tenido muchas ideas de creación de productos y servicios. Y todas ellas tienen algo en común: han seguido una serie de procesos desde su origen hasta el resultado final. El seguimiento de estos procesos en tu cadena de producción es lo que se conoce como trazabilidad y genealogía de producto, y va mucho más allá de “ir del punto A al punto B”.
En efecto, en los procesos de trazabilidad de productos entran en juego la aplicación de estándares de calidad (por ejemplo, las normas ISO, pero hay muchas más), mediante una sistematización que reduce al máximo los errores al tiempo que ahorra tiempo y costes. Por ejemplo, podrías construir un cohete para llegar a la Luna, pero tal vez hacerlo en madera no sea la mejor idea. Cuando se aplican las normas de estandarización y un software de trazabilidad industrial, la metodología adquiere sentido.
La trazabilidad de procesos es fundamental para identificar errores en el flujo de creación del producto o servicio. Volviendo al ejemplo del cohete de madera, puedes construir todas las piezas perfectamente en madera, pero en la primera prueba de lanzamiento del cohete te darás cuenta de que la madera no era el mejor material (ten un buen extintor a mano). Elegiste los materiales erróneos, pese a que las piezas eran perfectas. En la trazabilidad de procesos, hay dos fases:
Trata sobre la propia elaboración del producto. ¿Qué materiales necesitarás? ¿En qué proporción? ¿Cuáles son los pasos logísticos a seguir (los llamados “tier”) para obtener tu producto final antes de lanzarlo al mercado?
Implica estrategias y procesos logísticos a partir de que el producto o servicio se ha lanzado al mercado. ¿Se ha roto un embalaje? ¿Se ha interrumpido la cadena de frío durante el transporte? ¿Tienes un plan de gestión en casos de manipulación errónea?
Cuando un producto no cumple con la calidad exigida, identificar los puntos del proceso de creación susceptibles de mejora o alguna corrección, es clave.
Ni qué decir tiene que si no tienes identificado todos los procesos que forman parte de la creación de un producto, te llevará más tiempo identificar errores al tener que revisar el proceso completo.
Hoy en día, los consumidores quieren saber qué están comprando. Si eres transparente en procesos de creación de tus productos, tu cliente final tendrá más confianza en ti.
Desde que entran los materiales a tu fábrica o empresa, han seguido unas normas de creación y transporte. Los estándares validan la cadena de suministros.
Conecta las distintas áreas de tu fábrica vertical y horizontalmente, sincronizando los detalles de las órdenes de trabajo, cantidades, tiempos, y más.
No es lo mismo para tus operarios trabajar bajo la incertidumbre y la improvisación, que sabiendo que están respaldados y asegurados por un estándar de calidad.
Examinamos tu fábrica o empresa para conocer el proceso de creación de tu producto o servicio.
Te asesoramos sobre los estándares necesarios y faltantes, si los hubiere, para garantizar el correcto flujo de trabajo.
Aportamos extras a ese flujo de trabajo, como por ejemplo códigos de barras o QR con datos internos para el seguimiento de cada paso.
Obtenemos datos en tiempo real para facilitar la rapidez de reacción de cara a la toma de decisiones.
Monitoreamos los resultados y hacemos seguimiento de la cadena de suministro.
En una fábrica de hornos microondas, controlar el stock de las partes que los componen, en función del outcome final de productos.
Realizar seguimiento de envíos controlando en todo momento el punto exacto donde está el paquete, mediante diferenciación de fases.
Mejorar el flujo de la cadena de suministro de tu fábrica y el control de calidad de tus productos finales en tiempo real.
Crear un log de las acciones diarias de todos los operarios y extraer las métricas de cada desempeño para detectar picos de mayor o menor productividad.
Contáctanos y te contaremos cómo ayudarte con la correcta trazabilidad de tus productos en tu fábrica